Proyecto territorial Centro – Oriente: balance semestral más que positivo

Los trabajadores sociales en formación de la Facultad de Ciencias Sociales y Humanas del Externado son “profesionales humanos y responsables, con una capacidad de liderazgo impresionante”, afirmó Diana Castellanos, funcionaria de la Secretaría de Integración Social del Distrito.

La declaración se dio durante la presentación del balance semestral de actividades del Proyecto Territorial Centro – Oriente que adelanta la Facultad en las localidades que circundan al Externado. El propósito es identificar las problemáticas de la población y velar por la garantía de sus derechos, para potenciar procesos de transformación social que contribuyan a disminuir la desigualdad y la violencia y a construir las condiciones de una vida digna.

Las intervenciones en las localidades de La Candelaria, Santafé, Las Cruces, Belén y la vereda Fátima, se sustentan en un enfoque de formación innovadora caracterizada por la investigación y la interdisciplinariedad, y en la articulación con organizaciones gubernamentales y no gubernamentales que prestan diversos servicios en estas localidades, con las que se realizan programas de manera articulada.

La presentación del balance fue conducida de manera virtual por la profesora Bibiana Chiquillo, con participación de los estudiantes que realizaron sus pasantías y prácticas en este proyecto.

La participación es ciudadana

¿Cómo hacer para que la participación ciudadana, establecida en nuestro ordenamiento, no se quede en el papel? Con inquietudes como esta, los estudiantes que se involucraron en el Centro de Desarrollo Comunitario para el Fortalecimiento de la Gestión Local identificaron problemas como el escaso presupuesto y la politización de los procesos. Los externadistas elaboraron una cartilla denominada “La participación es ciudadana”, en la que proponen fórmulas para incrementar la inclusión de los habitantes en los procesos participativos, entendidos como la forma democrática de incidir en cambios y adelantar acciones comunitarias promoviendo la participación en la definición de planes de desarrollo.

Sacar a los adultos mayores del cuarto de Sanalejo

El proyecto adelantado por los estudiantes de Trabajo Social con la Secretaría de Integración Social del Distrito, se centró en acciones para recuperar la dignidad del adulto mayor como persona que aporta grandes cosas a la sociedad, con derecho a un envejecimiento digno, activo y feliz.

Para ello se realizaron intervenciones (presenciales hasta donde se pudo y luego utilizando medios como el Whatsapp y el teléfono) en los centros día/noche, donde se identificaron realidades preocupantes en materia de salud mental como depresión, ansiedad y estrés (aumentadas por la pandemia) y se aplicaron estrategias para contrarrestar su impacto.

Para detectar de manera temprana los riegos en la materia, los estudiantes de Trabajo Social idearon instrumentos como el ‘violentómetro’, una técnica de medición de la violencia a la que está expuesto el adulto mayor diariamente e identificar situaciones alarmantes. Además, el grupo del Externado pudo comprobar, tras el análisis poblacional realizado, cómo se manifiesta en esta localidad la tendencia hacia el envejecimiento de la población que se advierte en toda la ciudad.

En el propósito de reforzar la condición de sujetos políticos de los adultos mayores, se los involucró en actividades de recuperación de la memoria colectiva y elaboración de historias sobre su aporte a la sociedad. Se realizaron sesiones de relato de vivencias, promoción de habilidades psicosociales por medio del diálogo intergeneracional y actividades como la huerta, la costura y la lectura de cuentos a los más jóvenes, que refuerzan la autoestima de las personas.

Una vereda en Bogotá

La existencia de una comunidad rural en pleno Bogotá implica no pocas tensiones sociales. A identificarlas y manejarlas se dedicó otro de los grupos de práctica de Trabajo Social, en la vereda Fátima, una reserva forestal conde viven 44 familias a pocas cuadras del centro de la ciudad. Se buscó hacer visible a esta comunidad que se reúne en torno a la Asociación de Campesinos Raíces de la Montaña ante las entidades del distrito.

En este escenario se logró una interesante sinergia entre un grupo de investigación en agrología de la Universidad Distrital y el equipo del Externado. Con ellos, se realizó un video sobre los planes de manejo ambiental de la vereda. Para el grupo de la Distrital la contribución del Externado en el restablecimiento del tejido social fue clave.

El proyecto incluyó iniciativas dirigidas a reforzar los lazos y la identidad comunitarios. Por ejemplo, se elaboró una caracterización del territorio, una cartilla con crónicas sobre la experiencia de la cuarentena para estos bogotanos y se presentó una propuesta de guía de turismo rural comunitario de la zona y un documento para el fortalecimiento interno de la organización social. Entretanto, practicantes de Antropología del Externado hicieron un análisis de los procesos de habitabilidad de los Cerros Orientales: cambios, prácticas y formas en las cuales se relacionan con la ciudad”, e iniciaron la investigación sobre una historia ambiental.

Discapacidad: enfoque en los cuidadores

Si son inmensas las necesidades de la población discapacitada, también lo son las de sus cuidadores, con la diferencia de que las demandas psicosociales de estos últimos casi siempre se ignoran. Por eso, otro de los grupos de la Facultad, en conjunto con la Secretaría de Integración Social del Distrito (área de salud) enfocaron el trabajo en los cuidadores, para acompañar, para explicar, para hablar, para escuchar. El proyecto se denominó “Mandala de cuidadores y líderes de las localidades de Santafé y Candelaria”.

Sumar, mejor que restar

Asimismo, el proyecto ha apuntalado iniciativas como los de la Fundación Abya Yala, colectivo artístico en la localidad de Las Cruces. Aquí, las diversas expresiones artísticas buscan reducir la exclusión y borrar los estigmas. El trabajo se dirige al reforzamiento de la identidad de una comunidad que se ha visto desplazada por procesos de gentrificación producto de la renovación urbana que le cambia la cara al vecindario y borra los vestigios de su identidad como las viejas construcciones coloniales. Se trabajó alrededor de un movimiento de apropiación territorial e identificación de las potencialidades que ofrece el territorio.

En el barrio Belén, las prácticas territoriales del Externado apoyaron la institución Casa B, alrededor de proyectos de fortalecimiento del tejido social. En esta línea se destaca la propuesta de turismo culinario con los sabores y los saberes tradicionales, y el respaldo a iniciativas como un emprendimiento de turismo en bicicleta por los lugares emblemáticos de la localidad.

Al final de cada presentación, los estudiantes, lideres, funcionarios y docentes invitados, definieron los que consideraron son los retos para el futuro en cada área, con miras a que los proyectos tengan una continuidad y se fortalezca el Proyecto Territorial Centro Oriente.