
El legado de Jorge Martínez Cotrina florecerá en el Externado
El auditorio principal del Campus de la Universidad Externado de Colombia fue testigo de un emotivo homenaje al decano Jorge Martínez Cotrina. Familiares, amigas(os), colegas y estudiantes se reunieron para rendir tributo a su vida y obra, recordando al maestro que durante dos décadas transformó vidas desde las aulas y los pasillos de la Facultad de Ciencias Sociales y Humanas.
“Con profunda tristeza nuestra comunidad registró el pasado mes de diciembre el prematuro deceso de nuestro decano, el profesor Jorge Martínez Cotrina. Hoy nos encontramos aquí para honrar su memoria y su legado”, expresó Hernando Parra Nieto, rector de nuestra Universidad, al iniciar la ceremonia.
«El profesor Jorge tenía una especial admiración por la belleza de las orquídeas y de la poesía, tal vez porque intuía que existía una conexión entre ellas. Lector concienzudo de Mario Benedetti, de Jorge Luis Borges y de Pablo Neruda, disfrutaba de sus versos tanto como de la obra de Humberto Maturana, biólogo y filósofo chileno. Su pasión por las artes y por el mundo la combinaba con sus deseos de viajar y descubrir nuevos lugares», recordó nuestro rector este 23 de enero.
Sus palabras resonaron entre los asistentes, muchos de los cuales no pudieron contener las lágrimas al evocar la huella indeleble que dejó el profesor Martínez.
La presencia de su madre, María Aydee Cotrina, y de sus hermanos Dolis, Liderman y Yecid, así como de sus sobrinos Daniela, Valentina y Nicolás, impregnó el evento de una calidez especial. Todas(os) ellas(os), rodeadas(os) de la comunidad externadista, compartieron un espacio de reflexión y gratitud por la vida del profesor, quien dedicó su vida a la educación y la investigación.
Durante el homenaje, se recordó cómo Jorge Martínez logró amalgamar en su trayectoria un profundo compromiso pedagógico y una rigurosa labor académica. Desde sus primeros pasos como docente en colegios públicos de Bogotá hasta la creación del Laboratorio Interdisciplinar de Ciencias y Procesos Humanos en el Externado, su contribución al conocimiento y a la formación de generaciones enteras fue ampliamente destacada.
“Su partida me ha mostrado lo profundos que son aquellos lazos de afecto y compañerismo que se tejen lentamente en la cotidianidad. Enfrentar su ausencia es uno de los grandes retos existenciales de la conexión humana”, reflexionó el profesor Juan Carlos Caicedo, colega cercano del decano, invitando a las(os) asistentes a valorar los vínculos que las(os) unen.
Las palabras de Juana Balanzó, representante estudiantil, resonaron especialmente entre las(os) estudiantes. Su intervención, cargada de gratitud y emotividad, reflejó el impacto que tuvo Martínez.
“Fuiste un excelente decano. Todo tu trabajo lo sentimos. Sentimos tu amor y tu esfuerzo. Sentimos tu ilusión y tus sueños. Te prometemos seguirnos esforzando por cumplir los sueños que nos dejaste. Y entregar los trabajos a tiempo y llegar puntuales a clase. Acá estamos habitando la facultad que por siempre te tendrá en el sustrato como si fueras sus ladrillos de las paredes. La tinta de los esferos y el abono para las flores. Clase: complejidad. Tesis: la materia jamás deja de existir sino que se transforma”, expresó Balanzó con una gran nostalgia.
El acto concluyó con un gesto simbólico que honra el espíritu del decano: la siembra de un árbol cerca al edificio D, un lugar que conduce a la Facultad de Ciencias Sociales y Humanas y que es representativo. Este árbol, ahora parte del paisaje del campus, se alza como un recordatorio vivo de su legado; uno que seguirá floreciendo en las generaciones futuras.
Entre abrazos, recuerdos y la promesa de perpetuar sus enseñanzas, la comunidad externadista despidió a un hombre que, como reza el poema de Borges citado por el rector Parra, fue parte de “Los Justos”, aquellos cuya bondad y acción continúan salvando al mundo. Jorge Martínez Cotrina deja una Facultad que lo recuerda con admiración y con cariño. Hoy es un espacio más humano y lleno de propósito. Su memoria queda sembrada en el corazón de la Universidad.