El viaje como herramienta de inclusión y sanación social

En el Externado se realizó el I Encuentro Nacional de Turismo Social, que reunió iniciativas a nivel nacional de turismo indígena, rural y comunitario con el fin de conformar el portafolio de turismo social y el directorio de proveedores de economía popular promoviendo el encadenamiento productivo de la cadena ampliada de valor del turismo.

*Natalia del Pilar Camargo
Profesora de Ética y Ambientalismo
Maestría en Planificación y Gestión del Turismo y Líder de Turismo Social Accesibilidad e Inclusión
Ministerio de Comercio Industria y Turismo

*Lizeth Paola Sánchez
Estudiante Facultad de Administración de Empresas Turísticas y Hoteleras

Es así como además de las iniciativas de turismo el evento contó con la participación de productores de cacao, café, miel, panela, pescado, entre otros. Dando así cumplimiento a la nueva visión que, desde el gobierno nacional, se tiene sobre la democratización del turismo a través del impulso al turismo social, el cual es concebido como un servicio público promovido por el Estado y ejecutado por prestadores de servicios turísticos, con el propósito de que todos los colombianos puedan acceder al ejercicio pleno de su derecho al descanso y al aprovechamiento del tiempo libre, a través del turismo, mediante el fortalecimiento de los territorios y las comunidades anfitrionas emergentes como un ejercicio regeneración a través del encuentro.

En línea con lo planteado con el profesor Vladimir, Magister en Estudios Políticos Latinoamericanos de la Universidad Nacional de Colombia y docente adscrito a la Maestría de Planificación y Gestión del Turismo, quien presentó el concepto del viaje como un medio para la transformación del ser y recurriendo a los relatos de viajes heroicos para escenificar por qué viajar es un acto de valentía que necesita ser honrado tanto por el que viaja, como por el que recibe. Lo que en palabras del antropólogo Joseph Campbell es el viaje del héroe.

El evento propuso una agenda que tuvo como protagonista las tecnologías sociales como mecanismo de articulación entre el estado, la comunidad y el territorio desde una visión sistémica y holística  que involucró saberes tradicionales para la construcción de herramientas de sanación para la resolución de conflictos comunitarios, trabajando el ser desde el interior y así reparar el tejido social, liderado por Marcela Arbeláez, abogada pionera en la implementación del derecho sistémico y las configuraciones jurídicas.

En esta actividad los participantes pudieron identificar las relaciones y el relacionamiento de los actores con el territorio y los principales agentes sociales a través de la representación de imágenes conscientes y subconscientes, lo que permitió sacar a la luz las dinámicas ocultas y las lealtades inconscientes que perpetúan los temas y dinámicas que limitan el bienestar de las comunidades frente al desarrollo turístico, para, posteriormente, cerrar el espacio a través de un ritual de reconciliación que promovió la toma de decisiones desde el rol que desempeñan cada uno de los participantes.

Es importante aclarar que los ejercicios sistémicos utilizados para el desarrollo de este taller no buscan reflejar la realidad profunda, la cual es compleja y multifacética, solo promueven la representación temporal de las imágenes internas sobre el lugar que ocupan o desarrollan en el sector turismo, siendo estas solo imágenes diagnósticas de las dinámicas de los vínculos sociales en un momento dado.

Lo anterior, teniendo en cuenta que los actores poseen distintas complejidades y realidades que afrontan desde su rol, incluyendo antecedentes históricos ligados a la violencia del país que los han impactado en mayor o menor medida, por lo cual, mediante este encuentro consciente con el otro fue posible abrir la posibilidad de generar un despertar desde la consciencia individual y colectiva para dar paso a la sanación social, una sanación que permita ver a las comunidades, al territorio y al estado como un todo y no como fragmentos, pues si bien todos tienen percepciones distintas, también tienen el mismo objetivo; el desarrollo del turismo en armonía con los territorios, con la naturaleza y, por supuesto, con la vida.

Como resultado de dicha interacción fue posible conocer puntos fundamentales para generar una apuesta de turismo social ligada a los sentires de las comunidades y sus territorios, pues estos expresan que velan por mantener la identidad del territorio, así como su concepción milenaria establecida por sus pueblos originarios y por el sincretismo cultural producto de las migraciones, su riqueza cultural y natural.

Esto se encuentra vinculado a lo expresado por uno de los conferencistas del Encuentro, Hugo Jamioy Juagibioy, pensador indígena quien proviene de la familia indígena Camsá del sur de Colombia, el cual expuso el rol de las comunidades vulnerables como tejedoras de territorio haciendo un llamado a conectarnos con la esencia del ser y desconectarnos de la idea del desarrollo colonial que reproduce sociedades que se desconectan de sí mismas, de los otros y de la naturaleza generando un alto costo para las comunidades.

Lo anterior da cuenta de la necesidad de optar por modelos de turismo que tengan una mirada integral desde diversas disciplinas, y, que más allá de la denominación, busque como objetivo romper las dos lógicas en conflicto del turismo, el turismo como derecho y el turismo como negocio, visibilizando la función social del turismo como un vehículo de trasformación social para el buen vivir desde la solidaridad y colaboración.

Por otra parte, se tienen apreciaciones desde el rol del estado, que juega un papel de importancia en la creación y ejecución de políticas públicas para promover un turismo articulado, que pueda propiciar las condiciones para organizar la cadena de valor directa y ampliada del turismo, fortalecerla a partir del acompañamiento en la planificación y gestión de esta actividad y, un reto aún mayor, que esto perdure y se mantenga en un constante progreso que traspase las barreras de los gobiernos de turno y se centren en la garantía de los derechos fundamentales como eje rector de la política pública.

Esto con base en el análisis presentado por la conferencista Erica Schenkel, posdoctorada en Ciencias Humanas, Sociales y Políticas, en la Universidad de Buenos Aires, quien planteó un recorrido histórico del turismo social generando reflexiones sobre su implementación que pueden perpetuar las desigualdades tradicionales de raza, género y clase, así como la explotación social y económica de los territorios. Esto considerando el bajo nivel de desarrollo del turismo social en países latinoamericanos y las escasas estadísticas e información que existe para medir el avance en dicha materia, evidenciando la necesidad de planear, ejecutar y medir las acciones encaminadas al fortalecimiento del Turismo Social desde Latinoamérica y Colombia mediante indicadores sociales.

Es así como culminan los espacios para la democratización del conocimiento desde distintos pensamientos y saberes, en el que las iniciativas turísticas con enfoque y propósito social estuvieron presentes para pensar y repensar aquellas fuerzas transformadoras a las que pueden apelar en sus territorios en pro de su bienestar y calidad de vida buena entorno al turismo, pues como manifiesta Morales (2016) “Un buen lugar para vivir, es un buen lugar para visitar”. Asimismo, se extendió la invitación a autoridades turísticas, a la academia, gremios del sector y prestadores de servicios turísticos.

Como cierre de este evento, las Danzas de Paz fueron las protagonistas, estas fueron lideradas por Carlos Rojas Director Ejecutivo de la Red Mundial de Danzas de Paz, quien a través de la música, el canto y la danza invita a generar un espacio de unidad y armonía colectiva, pues por medio de estas se unen distintas tradiciones espirituales del mundo en búsqueda de mostrar la interdependencia que se tiene como seres, se da importancia a la empatía, es decir, al saber qué se siente estar en el lugar del otro. Con esta experiencia no solo se logra un espacio de integración, también es posible crear conexiones emocionales, puesto que, estos mantras en movimiento permiten la reconciliación y la paz desde lo individual hacia lo colectivo.

Es así como estos actores principales se reunieron, se escucharon y juntos tejieron “literalmente” las bases de la red de Turismo Social en el marco de la cooperación, asociatividad y gobernanza.

Las fotografías fueron tomadas por los asistentes.