Corrupción privada, ¿usted qué está haciendo para desterrarla?

La más reciente encuesta de Transparencia por Colombia y la Universidad Externado de Colombia sobre percepción del soborno y la implementación de prácticas para contrarrestarlo en 690 empresarios nacionales, revela que este delito continúa siendo una práctica muy generalizada en la manera de hacer negocios.

  • 96% de los empresarios (un 5% más que en la Cuarta Encuesta aplicada en el 2014) percibe que “hay empresarios que ofrecen sobornos en el entorno de sus negocios”.
  • En una coyuntura de elecciones presidenciales,  preocupa que solo un 8% de los encuestados asegura que su empresa lleva un registro contable exacto de las  contribuciones a campañas políticas.
  • A pesar de evidenciar que el soborno es una práctica generalizada en los negocios, se mantiene un bajo resultado de medidas para mitigar este fenómeno. Sólo el 46% de las empresas implementan prácticas de forma planeada, periódica e invierte recursos para su ejecución.
  • 7% es el promedio ponderado del valor del contrato que se paga de manera secreta para ganar la adjudicación. De acuerdo con los resultaos del 2014, este promedio se disminuyó en 0.6 puntos porcentuales (17.3%)[1].
  • El 64% de los empresarios aseguran que si no se pagan sobornos, se pierden negocios.

La percepción del soborno por parte del empresariado encuestado sobre el ofrecimiento de sobornos en el entorno de los negocios aumentó 5% con respecto al 2014, pasando del 91% a un  96% en el 2016. Así, el nivel de percepción de ocurrencia del soborno sigue siendo muy alto y en aumento, revelando un panorama negativo en las relaciones de confianza en los negocios, a la vez que también aumentó la percepción, del 63%, sobre “si no se pagan sobornos, se pierden negocios”.

Para el 2016, las modalidades más usadas de soborno son los pagos para agilizar trámites (67%), el cierre de negocios y/o contratos ocupa el segundo lugar de modalidad más común para ofrecer un soborno, con un resultado de 53%, el cual disminuye veintitrés puntos porcentuales con respecto al 2014, y las contribuciones políticas (51%) (Anexo – Gráfica No. 1). Esto, sumado al bajo porcentaje de las empresas que llevan un registro contable exacto de las contribuciones (8%), lo cual puede representar un posible riesgo de corrupción con miras a las elecciones legislativas y presidenciales del 2018.

Para Andrés Hernández, Director Ejecutivo de Transparencia por Colombia, resulta clave que el sector privado rinda cuentas sobre la financiación electoral y pida cuentas a quienes financia, debido a que “los aportes privados a campañas, hechos bajo reglas y normas adecuadas, son una expresión democrática y contribuyen al fortalecimiento de la participación. Pero ante la ausencia de normas claras y controles apropiados, las contribuciones privadas pueden convertirse en una potencial captura de las decisiones a favor de intereses particulares”.

Por otro lado para Gustavo Yepes, profesor de la Universidad Externado de Colombia y director de la investigación, el soborno se constituye en el país como una práctica recurrente y prácticamente institucionalizada. Según el estudio los empresarios manifiestan que para hacer negocios tanto en el sector público como en el privado es necesario el soborno.

¿Qué están haciendo los empresarios para frenar el soborno?

En comparación con el 2014, hay un aumento de 9 puntos porcentuales en la implementación de prácticas para combatir el soborno de forma planeada y periódica, siendo así un  47% de  empresas las que implementan o desarrollan buenas prácticas (2014, 38%). A esto, se le suma el aumento de 16 puntos porcentuales de los empresarios que consideran que las prácticas contra el soborno aplicadas por ellos son de utilidad para luchar contra este flagelo (65%).

Para el 2016, hubo un aumento de tres puntos porcentuales (25%) en el número de empresas que no implementan prácticas para contrarrestar el soborno en aspectos como contribuciones políticas, donaciones, patrocinios y regalos y gastos de representación. Pocas llevan registros contables sobre estos temas, definen topes máximos o evalúa la existencia de posibles conflictos de interés. (Anexo Tabla No.1). 

Otros Resultados 

  • La corrupción como obstáculo para la paz. El 94% de los empresarios considera que la corrupción es un obstáculo para la consolidación de la paz en Colombia. Tan sólo un 3% considera que este fenómeno no es un obstáculo para lograr la paz en el país.
  • Estatuto Anticorrupción. El 40% de los encuestados manifestó conocer la medida aprobada en agosto de 2011, 18% más que en el 2014.
  • Conocimiento Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico – OCDE. El 65% de los empresarios manifestaron no haber oído sobre los lineamientos para empresas multinacionales de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico –  Solo el  4% de los empresarios manifestó que se están implementando estos lineamientos al interior de sus empresas.
  • Conocimiento sobre la Convención para Combatir el Cohecho de Servidores Públicos Extranjeros en Transacciones Comerciales Internacionales de la OCDE. El 83% de los empresarios no conoce la “Convención para Combatir el Cohecho de Servidores Públicos Extranjeros en Transacciones Comerciales Internacionales de la OCDE”.
  • Del 42% de las empresas que tiene lobistas, sólo el 14% los contrata formalmente, el 10% cuenta con una política para asegurar que la remuneración a éstos sea apropiada y justificable para realizar un servicio legítimo y el 73% no cuenta con ninguna práctica para regular la relación con lobistas.
  • Canales de denuncia. El 54% de las empresas no cuenta con un canal de denuncia confidencial para los empleados y terceros que deseen denunciar posibles casos de soborno.

“La confianza y la ética en las empresas para la lucha contra la corrupción y la construcción de lo público”

Para Transparencia por Colombia “los resultados de la encuesta son un llamado a movilizarse contra el soborno y contra la corrupción”. Según Marcela Restrepo Hung, Directora de Gestión del Conocimiento, es necesario fomentar una cultura de principios y de prácticas que permitan mitigar los posibles riesgos de corrupción en la gestión empresarial, además, se debe promover la denuncia de hechos de soborno e incrementar la apertura informativa sobre aspectos claves como contribuciones políticas, donaciones y patrocinios, entre otros aspectos, con el fin de enfrentar los desafíos que debe asumir el país en cuanto al desarrollo sostenible, el fortalecimiento de la democracia y la construcción de la paz.

[1] Este cálculo se realizó mediante el método de promedio aritmético ponderado: M(Yi)=∑(Yihi)

Anexo 

Gráfica No.1, –  Modalidades que son usadas por los empresarios para sobornar

 

Tabla No. 1 Prácticas de Prevención

Prácticas de Prevención Componentes
Contribuciones Políticas Donaciones Patrocinios Regalos y Gastos de Representación
La empresa lleva un registro contable exacto de 8% 30% 20% 23%
La empresa brinda información a quien lo solicite 3% 16% 15% 15%
Evalúa la existencia de posibles conflictos de intereses 10% 16%
La empresa define topes máximos 20% 29%
La empresa da a conocer a sus empleados y terceros su posición frente al manejo de 14% 19% 12% 26%
Ninguna 35% 18% 17% 41%

 

Ficha Técnica 

  • Tipo de muestra: Al igual que los estudios anteriores (2008, 2010, 2012, 2014) la muestra fue de tipo estratificada proporcional al tamaño de la empresa.

  • Bogotá 63%
  • Medellin 9%
  • Pereira 8%
  • Cali 7%
  • Bucaramanga 5%
  • Barranquilla 1%
  • Ibagué 3%
  • Tunja 3%

Se encuestaron a un total de 690 empresarios de empresas pequeñas, medianas y grandes, pertenecientes a los sectores: comercial, Industrial de Transformación, Construcción, Financiero, Salud, Comunicaciones, Educación, Agro, Transporte y Extractivo.