“La protección de los recursos naturales debe estar por encima de cualquier problema o desacuerdo social”: Juliana Hurtado Rassi

La docente e investigadora del Departamento de Derecho del Medio Ambiente de la Universidad Externado de Colombia, Juliana Hurtado Rassi, presentó su tesis doctoral titulada “Estrategias para la gestión conjunta de ecosistemas transfronterizos: Especial atención al caso de la Reserva de Biosfera Seaflower”, en el marco del Green Moon Festival 2021, que se realizó en San Andrés.

Hurtado es bióloga de la Universidad de Los Andes e investigadora del Grupo de Investigación de Derecho del Medio Ambiente de la Universidad Externado de Colombia (CIMA) y del Grupo consolidado de Investigación AGUDEMA (Agua, Derecho y Medio Ambiente) de la Universidad de Zaragoza, España.

Recientemente, la docente hizo su doctorado en Derecho en la Universidad de Zaragoza; sustentó su trabajo de investigación en enero de 2020 y, a finales del mismo año, la Universidad Externado de Colombia realizó la publicación del mismo.

Su investigación tiene por objeto exponer la necesidad de implementar estrategias de gestión conjunta para los ecosistemas transfronterizos, teniendo como fundamento que la naturaleza no conoce de fronteras y por lo tanto el manejo de esos lugares se debe dar partiendo de dicha premisa.

“Lo expuesto se analiza a la luz de un caso de la Reserva de Biosfera Seaflower, ya que, en razón del Fallo de la Corte Internacional de Justicia de La Haya, este ecosistema quedó en jurisdicción no solo de Colombia sino también de Nicaragua, y a la fecha no existe un instrumento de gestión conjunta para este ecosistema estratégico, que año tras año soporta las consecuencias de la disputa territorial que aún existe entre los dos países”, aseguró Hurtado.

La docente también comentó que la investigación pretende exponer la importancia del trabajo articulado entre los Estados que comparten un mismo ecosistema, y demostrar que la protección de los recursos naturales y la garantía de la conectividad ‘ecosistémica’ dependen del manejo conjunto que se establezca para estos.

“Los conflictos políticos entre, o dentro de, los Estados, no deberían ser jamás razón para la degradación ambiental. La protección de los recursos naturales debe estar por encima de cualquier problema o desacuerdo social. Como se menciona a lo largo de este libro, la naturaleza no conoce fronteras políticas, y la conectividad de los ecosistemas y el relacionamiento de las especies no distingue diferencias sociales, políticas ni culturales”, afirmó la externadista.

En la misma línea, la investigadora hizo un llamado a pensar en la protección y conservación del medio ambiente y los ecosistemas de manera global, con la firme convicción de que, para tener un mundo justo y en paz, es preciso empezar por garantizar la justicia ambiental.