Territorialidades y política: Un estudio de las discusiones del POT en Bogotá

Con el aumento y expansión de las ciudades a nivel mundial, la importancia de la participación ciudadana se ha vuelto fundamental para el buen funcionamiento de las ciudades moderna. Las relaciones constructivas entre las comunidades y las instituciones de gobierno hacen que la participación de la ciudadanía no solo sea deseable, sino necesaria y viable, ya que es probable que conduzca a decisiones públicas más equitativas y sostenibles y mejore la calidad de vida de todos. Por eso, la participación ciudadana es importante tanto para las personas como para las organizaciones públicas y los gobiernos.   Actualmente, en Colombia se vienen desarrollando ejercicios de revisión general o de modificación a los Planes de Ordenamiento Territorial (POT), enmarcados en los lineamientos de la ley 388 de 1997. En ese marco, la administración de Claudia López inicio el proceso definición de una nueva hoja de ruta para el ordenamiento territorial de la ciudad capital en donde se buscó, a través de la participación ciudadana, que este instrumento reflejará la construcción de una ciudad plural e incluyente de las necesidades de los distintos sectores económicos y sociales. En este sentido, si bien corresponde a las administraciones la implementación de mecanismos y espacios que garanticen de forma efectiva la participación ciudadana en las distintas fases: diagnóstico, formulación, implementación, seguimiento y evaluación de los POT, lo cierto es que no siempre estos mecanismos resultan en ejercicios de participación activa e incidente.