La alegría de vivir las bibliovacaciones con el Externado

Floralba y Heidi estaban barriendo las hojas de los árboles cuando varios voluntarios de la Universidad Externado de Colombia llegaron a la vereda Fátima, localidad Los Mártires, centro extendido de Bogotá, a compartir experiencias con la comunidad.

Ellas, otras mujeres de la Fundación Raíces de La Montaña, la biblioteca de la Universidad, el Departamento de Bienestar Universitario, la Facultad de Ciencias Sociales y Humanas, el Proyecto Egipto Vivo y la Facultad de Finanzas, Gobierno y Relaciones Internacionales, habían organizado las bibliovacaciones para más de 20 niños y niñas que habitan este territorio. De esta manera, se llevaba un poco de alegría y entretenimiento para la población campesina y vulnerable de esta zona rural, que está en pleno centro de la capital del país. Muy cerca de nuestra Casa de Estudios.

La experiencia fue enriquecedora para niños y niñas, entre 3 y 11 años, y por su puesto para profesores y demás personal administrativo que acompañó la actividad. Las líderes de la fundación presentaron el territorio, desde sus vivencias y la de sus antepasados muiscas. Luego llegaron los pequeños y comenzó la diversión, con rondas y actividades lúdico pedagógicas infantiles.

De esta manera, cada uno pudo elaborar, con recursos manuales, una tarjeta de navidad. Algunos le escribieron a Papá Noel, otros al niño Dios y muchos lo hicieron a sus seres queridos. Por ejemplo, Mateo, con menos de 4 años dibujó un arbolito de Navidad y lo decoró con escarcha y crayolas de colores. Su hermano mayor, Nicolás, fue el afortunado en la rifa en la que ganó un juguete de mamut. Otros niños hicieron renos, estrellas, papás Noel, botas de navidad y muñecos de nieve.

Se destacó el muñeco de nieve de Christian, quien lo adornó con escarcha simulando que estaba parado sobre césped verde, y al mismo tiempo le caían copos de nieve de algodón. Algunos, pusieron estrellas al interior y mensajes poéticos de amor y alegría. Las mamás, quienes acompañaron a los más pequeños, también se vincularon a la actividad manual. Ellas crearon sus propias tarjetas navideñas con mensajes muy profundos.

Gabriela, muy participativa, se destacó por su excelente memoria en las rondas del ratón japonés y otras canciones que permitieron romper el hielo con los voluntarios. Ella hizo una tarjeta con diferentes bolas de navidad. Para ello usó el algodón, la escarcha y varios colores.

Natalia, Iker, Sofía, la pequeña Mía y todos los que llegaron al encuentro al aire libre, pasaron horas de esparcimiento con profesores de la facultad de Ciencias Sociales y Humanas y la facultad de Finanzas, Gobierno y Relaciones Internacionales y, el personal administrativo del Departamento de Bienestar Universitario y la Biblioteca. El marco fue la hermosa vista de la ciudad de Bogotá; rodeados de naturaleza nativa recuperada por los campesinos de la vereda. No se dejaron ver las zarigüeyas, las garzas andinas, ni otros animales propios de los cerros orientales, que las mujeres líderes en esa zona rural del centro de la capital del país, cuentan se ven algunos días.

El proyecto Egipto Vivo, semanas antes, se dio a la tarea de recolectar donaciones y regalos, que hizo llegar a los pequeños. Esta labor, se replicará los primeros días del mes de diciembre, en Lourdes y en Belén, para llevar alegría a los niños y niñas de los barrios cercanos a la Universidad.